El Bhagavad-Gîtâ, el «Canto del Venerable», es un episodio del Mahabharata, extenso libro filosófico hindú y de sabiduría universal, que versa particularmente sobre el diálogo que mantuvieron Krishna y Arjuna, quien cuestiona al divino maestro preguntándole por qué debe luchar a muerte contra sus familiares y hermanos.
Esta metáfora nos recuerda la diferencia entre el papel/es que nos toca interpretar en la vida material, de los sentidos, y que debemos ejecutar y que nada tiene que ver con nuestra naturaleza divina e inmutable. Viene a decirnos que esos papeles que tenemos que interpretar y que muchas veces no nos gustan, en el teatro de la vida, son por algo y para algo. Están íntimamente relacionados con nuestra evolución espiritual y con la de los demás. Todos somos actores y todos estamos influenciándonos permanentemente.
Foto: Poras Chaudhary
Nuestra percepción es que muchas veces estas interacciones son positivas pero otras, pensamos que son negativas. Nada más lejos de la verdad, todo lo que vivimos es por algo y para algo, todas las experiencias de la vida deben vivirse porque siempre hay una enseñanza detrás de cada vivencia.
Krishna le dice a Arjuna que no puede negarse a cumplir con su destino, con su papel, porque en nuestra evolución espiritual es necesario vivir determinadas cosas para seguir creciendo. Los maestros dicen que los sufrimientos y pruebas de esta vida, no son un castigo sino un medio poderoso de purificación.
Y para concluir con esta reflexión, para mí uno de los aspectos más difíciles de interiorizar de esta enseñanza es soltar el resultado de cualquier acción, desapegarnos de lo que ocurra o de recibir recompensa alguna por lo que hagamos. Es decir, actuar con amor, desde el corazón, más allá de lo que después ocurra y que ya no dependerá de nosotros, sino de Dios!
Luz y amor para todos, PATRICIA
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