El triunfo de una voz sobre un cuerpo

La cantante inglesa Adele arrasó en los grammy de EEUU y en los premios británicos de la música. Para mí la buena noticia es que su imponente voz y su talento, se ha impuesto sobre su sobrepeso y sobre el resto de cantantes, también magníficas, pero con cuerpos prefabricados tiranizados bajo el supuesto gusto del público.

Adele abre una esperanza en este mundo donde cada vez más nos imponen a todas las mujeres cumplir con unos supuestos cánones de belleza que lleva a muchas a la desesperación, depresión, bulimia, anorexia, inseguridad, dificultades para conseguir un empleo…

 Ni que decir sobre las jovencitas a las que estas presiones les resulta una losa difícil de digerir y que si no están debidamente apoyadas acaban sucumbiendo a esta sinrazón y con un resultado incierto.

No estoy haciendo apología de la obesidad, ni estoy en contra de las caras bonitas. Un cuerpo y una cara bonitos son un don de Dios y se además va acompañado de inteligencia mejor que mejor, pero el mundo está lleno de personas, la mayoría, con cuerpos y caras normales, muy válidas, que tienen también mucho que aportar y esto y solo esto es lo que debería importarnos. Todo lo demás es ruido que lo único que provoca es que nos alejemos de nuestro verdadero ser.

Menos mal que el público de a pie, en este caso, ha puesto las cosas en su sitio y un poco de cordura en este loco mundo. Adele ha ganado porque ha habido 6.000.000 de personas que compraron sus discos, son estas personas normales de a pie las que han influido en el jurados, al que no le ha quedado más remedio que centrarse solo en su voz y su talento dejando  a un lado lo superfluo y banal.

Ahí os dejo un vídeo con su preciosa voz!

 

Luz y amor para todos, PATRICIA

El mito de la media naranja reinterpretado

Según los griegos los dioses crearon “completo” al ser humano y lo había de 3 clases: hombre-hombre, mujer-mujer y hombre-mujer con 1 cabeza, 4 brazos y 4 piernas. Pero los humanos empezaron a creerse Dios y Zeus para escarmentarlos los partió en dos mitades, por tanto llegamos a la época actual buscando a la media naranja perdida...

En realidad nacemos como seres “completos” y divinos, no necesitamos que nadie venga a completar nada, porque no hay nada que completar desde el exterior, lo que sí es verdad y deseable es que con los años vayamos creciendo y "completando" nuestra personalidad, espíritu, mentalidad...

En nuestra cultura occidental, a las mujeres, nos hicieron creer que para estar “completas” necesitábamos de un hombre: fuerte, firme, decidido,  que traiga el pan a casa…, todas características que nos han hecho creer que no tenemos y, peor aun, para las que no valemos…que terrible… porque nos lo hemos creído! Con una autoestima por los suelos, que desesperadamente intentamos ocultar a nuestras hijas mujeres, aun con todo esto hemos salido adelante!

 Muchas logramos vencer ciertas barreras, pero todavía nos quedan muchas otras que derribar, para entonces sí, levantar la cabeza y afirmar que somos seres “completos” y que las dos mitades (nuestra naturaleza completa y divina con la que nacemos) vuelvan a juntarse en nuestro interior.

Las personas caminamos hacia una mayor consciencia de la necesidad de crecer como individuos y de esta forma completarnos, más y mejor,  para alcanzar un mayor desarrollo espiritual y personal, algo que el mundo necesita y está reclamando a gritos!

El encontrar un buen compañero de viaje en la vida, es otra cosa y un buen tema para otro post!

Luz y amor para todos, PATRICIA

Me veo y me reconozco en el otro

Porque estamos siempre juzgando al otro?, su aspecto, forma de vestir y peinarse, su comportamiento, cómo vive, cómo habla, que amigos tiene, si es miserable, vago, homosexual, gordo, flaco o sucio...

Será quizás que si nos ocupamos del otro no pensamos en nosotros mismos?

Será que lo que no nos gusta ver en nosotros lo proyectamos en otro, para no asumirlo?

Será que así nos sentimos importantes porque en el fondo nos consideramos poquita cosa?

Será que tenemos un pensamiento rígido, nos creemos los dueños de la verdad y que nuestra manera de vivir es la mejor del mundo y ninguna otra vale?

Será que somos racistas, intransigentes, soberbios, fanáticos…

O será que queremos jugar a ser Dios, ponernos en su papel y con el dedo acusador barrer del planeta la escoria humana…

Dios si es divino no juzga, no va con su naturaleza amorosa. Si Dios existe es todo perfección, amor, comprensión, perdón, aceptación…

Todavía no tomamos conciencia que lo multicultural, multirracial, las distintas personalidades, formas de vivir, de trabajar, de aprender, de amar, de convivir, son siempre una riqueza.

A lo mejor necesitamos ser un poco más indulgentes con nosotros mismos para serlo con los demás, a lo mejor debemos parar de juzgarnos con crueldad para dejar de hacerlo con los otros. Deberíamos, de una vez, aceptarnos tal y como somos!

En vez de machacarte una y otra vez y usar a los otros como espejo de lo que no te gusta ver en ti estaría bien cambiar el chip, dar un giro de 180º y empezar a ver lo bello que hay en las personas y que, por fin, el que tengas enfrente te espeje lo bello que hay en tu interior, que os mucho y muy hermoso, solo tienes que dejarlo salir y que se manifieste!!

Luz y amor para todos, PATRICIA