Nunca pensé que
acabaría hablando de política en mi blog nada más alejado de mis intereses después
de la experiencia nefasta que tuve con dieciocho años. Milité en un partido
político durante seis meses y me bastó para acabar asqueada, de tal manera, que
desde entonces lo más cerca que estuve de la política ha sido ir a votar.
“Que el mundo fue y será una porquería ya lo
sé… ¡En el quinientos seis y en el dos mil también!.... ¡Hoy
resulta que es lo mismo ser derecho que traidor!... ¡Ignorante, sabio o chorro,
generoso o estafador!¡Todo es igual!¡Nada es mejor!¡Lo mismo un burro que un
gran profesor!...”.
Este tango, titulado Cambalache, lo compuso
Discepolo en 1934. Me entristece pensar que su vigencia es absoluta y lo peor,
que nada ha cambiado, parece que lo
hubiera escrito ayer viendo las noticias. Recomiendo leer la letra íntegra
porque no tiene desperdicio.
Y así vivimos, en
un mundo de locos en el que nos gobiernan: ladrones, estafadores, delincuentes,
ignorantes, traidores, mentirosos, ruines, asesinos…
Es exactamente
igual si hablamos de Europa, América o Asia. España está siendo golpeada
últimamente por todos lados. El refrán español ya dice: “a perro flaco todo son pulgas”. O como dicen en Argentina: “parece
que estamos meados por los perros”.
Las noticias y
acontecimientos superan a una población que con la boca abierta y sin dejar de
babear, no para de sorprenderse. También es verdad que ya llegamos al límite de
lo posible, ¿o tal vez no?, quiero decir: solo faltaría levantarnos con una
noticia sobre corrupción del mismo Rey
–y se está librando por un pelo- o el cardenal Rouco Varela –mejor hablemos de
otra cosa-.
Lo que me pregunto
es lo siguiente: ¿En España, quien está
detrás del Caso Bárcenas, a quien favorece derribar a Rajoy y su cúpula?… ¿No
será que los más reaccionarios y ultras de su propio partido, los más
ultraconservadores, están preparando el terreno para desembarcar como los
salvadores?....
Dios me asista y
aparte de mi mente calenturienta semejante idea… Prometo hacer penitencia y
todo con tal de que semejante sinrazón pueda tan siquiera estar en la mente de
nadie…
A los ciudadanos
nos toca ahora decir “basta” con un puño
en la mesa y golpeando fuerte. Somos nosotros desde las ideas y la protesta
los que podemos hacer que se vayan y parar los pies a los pseudo-salvadores.
Hay que tomar partido. Ha surgido una página que se ha propuesto conseguir un millón de firmas para pedir la dimisión
de la cúpula del PP. Es un comienzo y ojalá surjan más de estas páginas para
pedir la dimisión de todos los políticos actuales, porque son todos más o menos
igual. A ver si tenemos la gran suerte de repetir lo del caso Watergate en el que Nixon y toda su plana
mayor dimitió y se fue… Me parece difícil que nos caiga esa breva, pero quizás
no es imposible si presionamos todos…
Los que me seguís regularmente
sabéis que jamás voy a caer en el pesimismo, sencillamente porque no produce
cambios y más bien predispone negativamente. Sacudámonos las pulgas y demos una
patada a los perros que nos quieran mear y ¡actuemos
ya! Cada uno desde su ámbito de actividad
que intente hacer las cosas bien y con honestidad. Los ciudadanos no
somos como los políticos, hagamos que Cambalache solo se refiera a unos pocos que,
si nos lo proponemos, podemos echar.
Nota: Mi agradecimiento al gran Quino, a través del cual he ilustrado este post!
Luz y amor para todos, PATRICIA
Mi estimada Patricia:
ResponderEliminarComparto tu escrito. Pero me gustaría añadir la necesidad de hacer un ejercicio de reflexión y plantear, que fueron mas de 8 millones de "firmas" (votos) los que pusieron al actual gobierno al frente del país. Dónde está la responsabilidad del pueblo que los votó? Éste y anteriores equipos de gobierno, el Pueblo es responsable de los dirigentes que tiene... No basta con poner o quitar equipos de gobierno con votos o recogidas de firma. La reflexión profunda de QUE tipo de Sociedad queremos y cómo se va a gestionar, es necesaria....
Estoy completamente de acuerdo, es el momento que asumamos la responsabilidad de nuestras decisiones si queremos cambiar las cosas. Buscando culpables no se resuelve el problemas. La corrupcion o la picaresca no es una cosa de una clase politica o social, esta demasiado enraizada en nuestra sociedad. Estamos ante una crisis de valores, etica social!!!!
EliminarTienes todo la razón. Me gusta pensar que lo viejo, anquilosado y hasta podrido está cayendo para dar paso a algo nuevo, construir desde abajo otra cosa, Ojalá sea así!, y que los 8 millones de respaldo se conviertan en 8 millones de reflexiones y rectificación...
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